Ningún grupo de votantes puede ser tomado por hecho
WASHINGTON, DC (PR) — Para la directora ejecutiva del Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva (NLIRH), Jessica González-Rojas «Los resultados de esta semana son una mezcla entre victorias, derrotas y lecciones importantes. La lección más importante de estas elecciones es que cada voto es importante y que ninguna comunidad o grupo de votantes debería ser subestimado".
A continuación más del comunicado emitido por González-Rojas:
Aquellos en espera de leer el futuro político de los EE.UU. en los patrones de votación harían bien poniendo atención muy de cerca a las mujeres de color. Ya que las mujeres de color continúan respaldando a los candidatos que apoyan el acceso a los servicios de salud, derechos básicos como el derecho al voto y el derecho a un aborto seguro y legal, así como la igualdad LGBTT, un salario digno y políticas migratorias justas.
Estamos complacidos al celebrar algunas victorias claves para la justicia reproductiva y la representación de las Latinas;
En Colorado, un referéndum extremista en la boleta electoral de ‘calidad humana para el feto’ fue derrotado de forma arrolladora—nuevamente. Dakota del Norte derrotó un referéndum similar. Ambas de estas victorias arduamente ganadas para las mujeres y las familias, son un recordatorio que muestra cómo cuando los votantes ven la historia real, rechazan que los políticos se inmiscuyan en sus decisiones personales.
En Rhode Island, celebramos la victoria de Nellie Gorbea, quien reunió el apoyo para ganar su postulación como secretaria de estado y se convirtió en la primera persona latina electa para una oficina estatal. En Texas, mientras Wendy Davis y su compañera de campaña Leticia Van de Putte perdieron su postulación, los votantes latinos apoyaron arrolladoramente al equipo en favor del derecho a elegir demostrando así que los votantes latinos están listos para el cambio en el estado de La Estrella Solitaria.
Finalmente, los votantes latinos constituyeron solo el 8% por ciento de los votantes del 2014 a nivel nacional, comparado con el 10% por ciento del 2012. Esta cifra en realidad representa un modesto incremento de un 1% por ciento en comparación con las últimas elecciones de medio término cuando, según el Proyecto Tendencias Hispanas del Centro de Investigaciones Pew, la cifra ascendía a un 7% por ciento.
Estamos profundamente preocupados por las mayorías conservadoras en contra de la mujer y en contra de los inmigrantes que sustentan el poder en ambas casas del Congreso de los EE.UU., incluso aunque representen las opiniones de un número cada vez menor de personas en los EE.UU. Para evitar que nuestra nación regrese peligrosamente al pasado, debemos confiar en nuestros valientes defensores en el Senado y sobre todo, en el presidente Obama, para retroceder y detener cualquier legislación que ataque a nuestras comunidades y que niegue nuestros derechos básicos.
Debemos estar vigilantes: El presidente tiene que estar preparado para usar su autoridad de veto y prevenir que se erosionen aún más nuestros derechos humanos.
Debemos también reconocer el daño actual de las tendencias poco solapadas de represión, tales como las leyes estrictas de identificación personal para los votantes nuevos en lugares como Texas y Carolina del Norte, las cuales constituyen una grave amenaza para nuestra democracia. Estas leyes restrictivas de votación afectan más severamente a las mujeres, la gente de bajos ingresos y los votantes de edad avanzada y con discapacidad física. A través de campañas de información errónea, y otras tácticas que explotan los recientes cambios profundos de la Ley de Derecho del Votante, se reprime al votante en estos tiempos modernos y se fragua una tendencia vergonzosa y molesta que silencia a nuestras comunidades y subestima nuestros valores como nación, y contra la cual debemos seguir luchando.
Nosotros en el Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva estamos orgullosos por haber tocado las puertas, distribuido materiales educativos para los votantes e inscrito votantes en Virginia, Texas y Florida—estados en donde el poder de las Latinas crece cada día más. Pero nuestro trabajo en estas comunidades no está para nada limitado a una temporada electoral. Nosotros estábamos allí antes y continuaremos organizando y movilizando a nuestra comunidad mucho después del día de las elecciones.
De frente al 2016 y más allá, es de vital importancia que involucremos, eduquemos y movilicemos a un número mayor de votantes que en el pasado, sin importar los obstáculos. Al mismo tiempo, debemos demandar que los legisladores que buscan nuestros votos, luchen por nuestros valores—ya sea año de elecciones o no». Finaliza el documento de González-Rojas.
- El Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva es la única organización nacional de la justicia reproductiva dedicada a desarrollar el poder de las Latinas y promover la salud, la dignidad y la justicia para 26 millones de Latinas, sus familias y sus comunidades en los EE.UU., a través del desarrollo de liderazgo, la movilización comunitaria, la abogacía de políticas públicas y las comunicaciones estratégicas.
WASHINGTON, DC (PR) — Para la directora ejecutiva del Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva (NLIRH), Jessica González-Rojas «Los resultados de esta semana son una mezcla entre victorias, derrotas y lecciones importantes. La lección más importante de estas elecciones es que cada voto es importante y que ninguna comunidad o grupo de votantes debería ser subestimado".
A continuación más del comunicado emitido por González-Rojas:
"Mientras que en varios lugares los políticos conservadores han ganado o retenido el poder, muchos solo lo lograron después de optar por una posición moderada en asuntos claves—incluyendo los derechos reproductivos—con el propósito de atraer a una base de votantes más amplia. Además, los temas progresistas en los referéndums han ganado, incluso aunque los candidatos progresistas no lo han hecho.
Aquellos en espera de leer el futuro político de los EE.UU. en los patrones de votación harían bien poniendo atención muy de cerca a las mujeres de color. Ya que las mujeres de color continúan respaldando a los candidatos que apoyan el acceso a los servicios de salud, derechos básicos como el derecho al voto y el derecho a un aborto seguro y legal, así como la igualdad LGBTT, un salario digno y políticas migratorias justas.
Estamos complacidos al celebrar algunas victorias claves para la justicia reproductiva y la representación de las Latinas;
En Colorado, un referéndum extremista en la boleta electoral de ‘calidad humana para el feto’ fue derrotado de forma arrolladora—nuevamente. Dakota del Norte derrotó un referéndum similar. Ambas de estas victorias arduamente ganadas para las mujeres y las familias, son un recordatorio que muestra cómo cuando los votantes ven la historia real, rechazan que los políticos se inmiscuyan en sus decisiones personales.
En Rhode Island, celebramos la victoria de Nellie Gorbea, quien reunió el apoyo para ganar su postulación como secretaria de estado y se convirtió en la primera persona latina electa para una oficina estatal. En Texas, mientras Wendy Davis y su compañera de campaña Leticia Van de Putte perdieron su postulación, los votantes latinos apoyaron arrolladoramente al equipo en favor del derecho a elegir demostrando así que los votantes latinos están listos para el cambio en el estado de La Estrella Solitaria.
Finalmente, los votantes latinos constituyeron solo el 8% por ciento de los votantes del 2014 a nivel nacional, comparado con el 10% por ciento del 2012. Esta cifra en realidad representa un modesto incremento de un 1% por ciento en comparación con las últimas elecciones de medio término cuando, según el Proyecto Tendencias Hispanas del Centro de Investigaciones Pew, la cifra ascendía a un 7% por ciento.
Estamos profundamente preocupados por las mayorías conservadoras en contra de la mujer y en contra de los inmigrantes que sustentan el poder en ambas casas del Congreso de los EE.UU., incluso aunque representen las opiniones de un número cada vez menor de personas en los EE.UU. Para evitar que nuestra nación regrese peligrosamente al pasado, debemos confiar en nuestros valientes defensores en el Senado y sobre todo, en el presidente Obama, para retroceder y detener cualquier legislación que ataque a nuestras comunidades y que niegue nuestros derechos básicos.
Debemos estar vigilantes: El presidente tiene que estar preparado para usar su autoridad de veto y prevenir que se erosionen aún más nuestros derechos humanos.
Debemos también reconocer el daño actual de las tendencias poco solapadas de represión, tales como las leyes estrictas de identificación personal para los votantes nuevos en lugares como Texas y Carolina del Norte, las cuales constituyen una grave amenaza para nuestra democracia. Estas leyes restrictivas de votación afectan más severamente a las mujeres, la gente de bajos ingresos y los votantes de edad avanzada y con discapacidad física. A través de campañas de información errónea, y otras tácticas que explotan los recientes cambios profundos de la Ley de Derecho del Votante, se reprime al votante en estos tiempos modernos y se fragua una tendencia vergonzosa y molesta que silencia a nuestras comunidades y subestima nuestros valores como nación, y contra la cual debemos seguir luchando.
Nosotros en el Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva estamos orgullosos por haber tocado las puertas, distribuido materiales educativos para los votantes e inscrito votantes en Virginia, Texas y Florida—estados en donde el poder de las Latinas crece cada día más. Pero nuestro trabajo en estas comunidades no está para nada limitado a una temporada electoral. Nosotros estábamos allí antes y continuaremos organizando y movilizando a nuestra comunidad mucho después del día de las elecciones.
De frente al 2016 y más allá, es de vital importancia que involucremos, eduquemos y movilicemos a un número mayor de votantes que en el pasado, sin importar los obstáculos. Al mismo tiempo, debemos demandar que los legisladores que buscan nuestros votos, luchen por nuestros valores—ya sea año de elecciones o no». Finaliza el documento de González-Rojas.
- El Instituto Nacional de Latinas para la Salud Reproductiva es la única organización nacional de la justicia reproductiva dedicada a desarrollar el poder de las Latinas y promover la salud, la dignidad y la justicia para 26 millones de Latinas, sus familias y sus comunidades en los EE.UU., a través del desarrollo de liderazgo, la movilización comunitaria, la abogacía de políticas públicas y las comunicaciones estratégicas.
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