¡Es la clase media, estúpido!

Stanley Greenberg ha trabajado para Clinton y Mandela entre otros políticos de relieve y es el fundador de una de las firmas encuestadoras. En un análisis sobre las próximas elecciones de Estados Unidos, basado en el comportamiento de la economía en distintos países y su impacto en la reelección, concluyó que para que un presidente se reelija la economía de su país debe crecer por lo menos un 4%. 

Siendo así, el consultor del ala demócrata enfatizó que la estrategia electoral de Obama, para poder reelegirse, deberá sostenerse en la siguiente tríada:

1. La economía tiene que crecer como mínimo un 4%.

2. La seducción de los grupos de votantes más vulnerables.

3. La clave es la clase media.

El crecimiento económico acumulado en la administración de Barack Obama tiene una constante y es que se da un crecimiento por debajo de las expectativas en los distintos años y trimestres de su gestión. De hecho, en el primer trimestre de este año 2012, apenas alcanza un crecimiento de 2.2%, por debajo del 3.3% del trimestre precedente.

Como dato curioso, el mismo día en que Greenberg brindaba una conferencia en Bilbao, Obama, en la Casa Blanca, anunciaba (a cinco meses de las elecciones) una flexibilización temporal de su política de deportación a los jóvenes y niños hispanos, que por lo menos llevan 5 años de estadía en EE.UU. Los latinos, afroamericanos, las madres solteras blancas son justamente los grupos de votantes vulnerables que mencionó Greenberg en su exposición. 

Con respecto a la recomendación de concentrar los esfuerzos en la seducción de los votantes de clase media, Greenberg aprovechó para anunciar que está trabajando con su colega James Carville (el hombre de "¡Es la economía, estúpido!) en la publicación de un próximo libro de autoría conjunta. ¿El título? "¡Es la clase media, estúpido!".

Visto el estado de las cosas que tienen que ver con la tríada de Greenberg, resulta evidente que Obama la tiene difícil en los tres flancos: la economía no se recupera al ritmo deseado y las expectativas no son halagüeñas; los latinos han estado descontentos porque el presidente no ha podido cumplir su promesa electoral de realizar una reforma integral de la política de inmigración norteamericana, y la tasa de empleo no crece o crece muy poco.

En respuesta, Obama no solo está siguiendo o coincidiendo con los consejos de Greenberg y Carville, sino también los que les diera, cara a cara, Steve Jobs, quien entre 2010 y 2011 pronosticó que el mandatario estaba trabajando para ser "un presidente de un solo período", lo que ocurriría si no le daba algunos giros a su gestión.

Según el comunicador Melvin Peña, Jobs se ofreció para realizarle la campaña publicitaria a Obama en 2012, porque creía que la publicidad política en general, salvo en rarísimas excepciones, es malísima. El genio de la Apple se murió meses atrás.

Carville explicó que el contendiente republicano de Obama, Mitt Romney, tiene las mismas políticas conservadoras que han puesto a la economía de Estados Unidos de rodillas. "El quiere continuar las políticas implementadas por George W. Bush y con el libro queremos recordarle que a la clase media hay que salvar para que la economía vuelva a repuntar", destacó el estratega demócrata. 

El ala extrema del Partido Republicano se ha lanzado desde el año pasado en una cruzada para desequilibrar la economía del país, desmantelar programas sociales que protegen a los pobres y desamparados del país y eliminar los sindicatos. La consigna es: "Tenemos que hacer que Obama fracase como Presidente", como lo vociferara en su programa radial Rush Limbaugh, considerado el portavoz de la extrema derecha republicana.